Un pino siempre nos dá lo mejor de él, siempre y cuando las cosas las hagamos correctamente. En este caso, un pino contorta recolectado me ha entregado la posibilidad de entender y "descubrir" uno de los problables secretos mejor guardados del entrenamiento ocupada por años por los maestros japonese para la formación de pinos Shohin y de manera acelerada.
Se sabe que el entrenamiento del pino desde semilla tiene una técnica muy específica y casi desconocida. Me refiero al torcer el árbol desde sus primeros años, de tal manera que haga un semi - espiral y así conseguir una curva que con los años se va a soldar y formar un tronco el doble de grueso y en la mitad del tiempo que si lo cultiváramos con las técnicas tradidionales.
El pino en cuestión tiene esta curva pero de forma natural, consiguiendo obtener un troco muy grueso y con la ramificación muy baja.
Detalle de la zona baja en donde se encuentran las ramitas.
EL tronco ya cortado. Siempre dejo un "tocón" de la rama podada para evitar que se perda savia innecesariamente, haciendo que el árbol se debilite.
El árbol ya alambrado ...
¡ ¡ ¡ con una altura de solo 11 cms. ... ! ! !
Detalle de árbol con una foto mejor hecha.
1 comentario:
Hola, ¿podrías poner alguna foto del estado actual? Me intriga lo que le has hecho.
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